Reseña Nº 216: Un reino partido por la mitad

Un reino partido por la mitad

Rosa Amanda Strauz

Natalia Colombo

Editorial Zig-Zag

32 páginas

Libro álbum

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Rosa Amanda Strauz nos sumerge en un mundo de fantasía de dragones, castillos, reyes y reinas. El pequeño protagonista de esta historia, es un príncipe. Vive en un reino ubicado en una pequeña isla. Habita un castillo junto a sus padres, el Rey y la Reina. Y, como en toda historia fantástica, una bestia sobrenatural causa el desequilibrio del mundo: Lo ha partido por la mirad. 

Todo, absolutamente todo el reino ha quedado partido por la mitad y la isla en donde se encontraba el castillo se dividió en dos partes, dejando al Rey en una y a la Reina en otra, separados por el mar. El pequeño príncipe deberá adaptarse a esta situación. Intentará seguir su rutina de todos los días: ir a la escuela, jugar con su perro, hacer las tareas. Todo esto mientras su mundo se ha dividido. 

Esta historia habla de división, separación. Un tema muy delicado que muchos niños deben enfrentar tempranamente en sus vidas. En las ilustraciones de Natalia Colombo, se grafica muy bien este efecto, la división es representada de forma física, textual y concreta. Quizá sea la manera más práctica de expresar el efecto de la separación de dos personas: todo queda dividido, incluso la mascota. 

¿Cómo lo enfrenta un niño? En el transcurso de la historia se cuenta el proceso que vive el pequeño príncipe para acostumbrarse a esta nueva vida, que parece no poder volver a ser como antes. Entonces, no le queda otra opción que acostumbrarse, y superar todos los obstáculos que ha causado la división. Estos van de cosas tan básicas como vasos y platos partidos por la mitad, hasta la separación de sus padres, cada uno en una mitad de isla.

El reto que debe enfrentar es grande, le cuesta, tropieza, siente miedo, pero su tenacidad es mayor y la historia toma tintes de superación, de aceptación y entendimiento.

El final de la historia realmente sorprende y conmueve, ya que, siguiendo las imágenes y el texto, inconscientemente el lector se concentra en cómo el príncipe superará los obstáculos de esta nueva vida, y no en algo fundamental y que está a plena vista, algo muy importante que solo será revelado en la última página.

Las ilustraciones son muy bellas, da la sensación de que se utilizaron pinceladas largas y continuas, sin levantar el pincel de la hoja. Transmite una sensación de alargamiento y unión que contrasta con la temática de separación. Es un efecto precioso en donde la técnica y el argumento se realzan mutuamente. 

La edición que nos presenta Zig-Zag viene en tapa dura y es muy elegante. Es de 27 x 21 cm, el tamaño ideal para que los niños y los adultos puedan leer juntos, pasar las páginas cómodamente y que nadie se pierda ningún detalle de la historia. 

Como todo libro álbum, nos invita a vivir la experiencia de leer imágenes y no solo texto. 

Muchas gracias a Zig-Zag Editorial por el envío del ejemplar. 

Ricardo Carrión

Administrador del blog