Arsene Lupin es un ladrón de guante blanco creado por el francés Maurice Leblanc. Pero es un ladrón bastante peculiar porque no roba injustamente, solo a los que no tienen escrúpulos y lo hace no solo con el afán de justicia, sino por el hecho del desafío en sí. Porque superar problemas y salir airoso de ellos es lo que le da vida a este personaje. Lupin tuvo tanta fama como el mismo Sherlock Holmes, fueron contemporáneos. Por lo mismo, la estructura de las historias y algunos elementos guardan muchas similitudes con las historias de Arthur Conan Doyle. Era tanto el auge de estos dos personajes que llegaron a enfrentarse en una misma historia. En la actualidad hay muy pocas editoriales que editen historias de Lupin, en cambio siempre podemos encontrar las de Sherlock Holmes. Pero gracias a Netflix que sacó una serie inspirada en el popular personaje se han vuelto a reeditar las historias de este famoso ladrón. Rocaeditorial sello perteneciente a Penguin Random House ha reeditado una serie de libros, no son todos los libros lamentablemente. Esperemos que el éxito sea suficiente para que editen todas las aventuras del gran Arsene Lupin. A continuación les dejo el orden de lectura de los libros que hasta el momento se han editado.
¡Hola a todos! Bienvenidos al Blog. Hoy les traigo la reseña-análisis de Frankenstein. Tengo que decir que me sorprendió
bastante la lectura de este libro porque tenía una idea preconcebida de la
historia y sobre todo de la apariencia del monstruo. La diferencia entre el
libro y las adaptaciones al cine y a la televisión es enorme. Así que, como consejo,
si van a leer este libro prepárense para una historia completamente nueva. Lo
único que siento se mantiene es el argumento principal. La de un científico,
Victor Frankenstein, que decide crear una criatura con vida propia y que luego la
rechaza por su aspecto.
Frankenstein es una novela publicada por
la escritora inglesa Mary Shelley el año 1818, principios del siglo XIX. Esto
es muy importante. Porque esta fecha indica que al igual que Los miserables (Victor Hugo),
Frankenstein pertenece al Romanticismo, en este caso al romanticismo inglés. El
cual plantea la rebelión del hombre contra la razón, contra el pensamiento
ilustrado. Es una época de transición. Donde se apela a la valorización de
lo irracional en el hombre, a la importancia de los sentimientos, de las
pasiones, en fin, de lo humano. Y que busca la libertad del hombre rompiendo
con todo lo rígido y otorgándole libertad creadora, la cual se manifiesta en la
creación del monstruo.
El movimiento romántico es el primer
punto importante a la hora de entender Frankenstein. El segundo es la época en
que se publicó, una época en donde la sociedad inglesa estaba en transición
entre el mundo rural y el industrializado. Por lo tanto, la ciencia también
estaba en auge, aunque aún rondaba una idealización del mundo de la alquimia. Esta
combinación producida en esa época, entre Alquimia, ciencia y romanticismo, desafía
la figura de Dios y pone al ser humano de carne y hueso en su lugar. Sale Dios
de la ecuación que genera vida y es reemplazado por el hombre. Aquí resuena el
subtítulo de la obra: El Prometeo moderno.
Este contexto es el que influyó en la
joven Mary Shelley que crea esta historia a los 18 años. Pero en un escritor no
solo influye lo externo, sino también lo interno, las propias experiencias. Es
ahí donde la propia vida de la autora, la temprana muerte de su madre, junto a
un padre que solo conocía el mundo intelectual pero nada del mundo familiar lo
que la impulsa a dotar a este monstruo de un desequilibrio emocional y
familiar. Si ponemos atención a esto, es como si el monstruo fuese el reflejo
de la propia autora. Muchos se asombran de que a tan temprana edad Mary gestara
tamaña historia, pero olvidan que pasaba escondida en los salones de su padre
mientras este recibía visitas de los intelectuales de su tiempo. La Joven Mary
absorbía todo dicho conocimiento a cambio del amor familiar que había dejado de
percibir. Además, cuando decide entablar una relación amorosa con Percy Shelley
es rechazada por su padre. Rechazo que se ve plasmado en el ser que crea
Victor Frankenstein.
Otro aspecto a considerar es que la
historia se gesta en una reunión donde se propone crear un relato a modo de
competencia entre los asistentes. El tema del relato sería: el terror. Último
elemento que combinado a los anteriores daría forma a esta inolvidable obra de
la literatura inglesa y universal.
El
monstruo es un cascarón con vida, es decir, tiene cuerpo, pero le falta
sustancia. En la novela Los miserables, por ejemplo, veíamos como Víctor Hugo
intentaba dejar en evidencia la parte interna del ser humano, su yo interior. En
Frankenstein, Mary Shelley hace el proceso inverso, debe llenar a este hombre
de sustancia. Debe llenarlo con todo lo que se compone el interior humano. Y no
se trata de órganos, que ya los tiene, sino de emociones, sentimientos y
conflictos internos. No intenta sumergirse en él para mostrarle a los lectores
su interior, no es una disección, es una construcción. La piezas están fuera y
nos muestra como las une y las combina para mostrar la naturaleza de un ser
vivo. Sus pasiones, sus deseos, sus miedos, esperanzas y fracasos. Su conflicto
existencial con la realidad. Pero esto puede ser muy amplio, es por eso que la
base para construirlo debió ser la propia experiencia de Mary Shelley, donde el
componente de la familia disfuncional es vital. Es un ser desequilibrado porque
carece de una base familiar estable, porque debido a su aspecto es rechazado,
porque no pidió venir a este mundo y debe sufrir de la soledad.
Este monstruo puede ser fácilmente
comparado con un niño que viene al mundo sin nada más que su alma y que debe
alimentarla con su entorno. Y dependiendo con lo que la construya, es como ésta
será. Si viene a un mundo donde carece del amor maternal y el paternal, donde
es rechazado por la sociedad y vive en soledad, solo queda un monstruo.
Aquí podemos encontrar otra similitud
con Los Miserables, un alma puede ser corrompida por una sociedad que causa
efectos negativos en ella y sobre todo si no tiene un base familiar que lo
respalde. Entonces se quiebra y se inclina hacia la maldad. Es decir, el
entorno influye sobre ella pero, ¿por cuánto tiempo puede corromperse un alma?,
¿es un proceso irreversible o tiene matices? Ahí está lo bello y filosófico de
la obra.
Otra aspecto que me gustó mucho de la
novela es su estructura. Muchos creen que Frankenstein está escrita de manera
tradicional, pero no es así, no hay diálogos, sino que se trata de una novela
epistolar y eso le da interesantes posibilidades a la autora y las explota muy
bien.
La estructura de Frankenstein es la
de una caja china, también se conoce como una narración enmarcada o de
historias concéntricas. Porque dentro del marco de una misma historia se
insertan varios relatos más, pero en el caso de esta novela es uno dentro de
otro y dentro de ese, otro. El marco principal de la historia o primer nivel es
el de la correspondencia que se da entre Robert Walton, un navegante, y su
hermana Saville. Cuando Walton se encuentra con cierto personaje durante sus
aventuras, se hace a un lado como narrador y deja que ese personaje cuente su
propia historia. Pero esa historia no es contada solo a Walton, sino también a
su hermana por medio de la correspondencia. Está enmarcada. Y dentro de la
historia de este segundo narrador, aparece la historia de un tercero, que el
segundo narrador se la cuenta a Walton y este a su hermana por medio de la
correspondencia. (Para una explicación más gráfica ver mi vídeo en youtube).
Además, dentro de cada un de estas
historias el narrador en ocasiones se hace a un lado para que otros personajes manifiesten
su propia voz por momentos, sobre todo de forma epistolar.
En cuanto a conclusiones o interpretaciones
de la historia uno puede llegar a muchas, porque la historia lo permite. El texto aborda muchos puntos sobre el ser humano y la sociedad en que vive:
1.- Por un lado podemos destacar el
peligro del abuso de la ciencia, los peligros de ir más allá de lo que podemos
controlar. Y la importancia de responsabilizarse de nuestras creaciones.
2.- La idea de jugar a Dios, de crear
vida sin tener en cuenta las consecuencias que podría generar.
3.- También se puede interpretar desde
una perspectiva religiosa, en la que Dios crea al hombre y lo abandona en el
mundo.
4.- La idea de la familia como pilar de
la estabilidad de un ser humano. La importancia de contar con los afectos y la
formación desde pequeño. Esto debido a que la historia se puede interpretar
como la de traer un hijo al mundo y abandonarlo a su suerte.
5.- También hay una crítica a la sociedad
que discrimina por la apariencia, que discrimina al que es diferente. Que está
lleno de habilidades que podrían ayudar a otros, pero que por ser diferente le
temen y lo apartan.
Es una historia muy filosófica que
puede interpretarse desde muchos ángulos y que nunca termina de decir lo que
tiene que decir.
Pueden encontrar esta misma reseña en mi canal de youtube