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miércoles, 4 de mayo de 2016

Reseña Nº 74: A todo vapor

A todo vapor (Mundodisco 40)

terry-pratchett
Terry Pratchett (1968-2015)
Sello Fantascy
Penguin Random House
Serie Mundodisco
Saga Revolución industrial
430 Páginas

A todo vapor es uno de los últimos libros escritos por Terry Pratchett, pertenece al extenso universo que compone Mundodisco. Yo apenas he leído unos cuantos títulos de los comienzos de este extenso mundo, pero aún así me arriesgué con "A todo vapor" y a pesar de que tuve que buscar algunos elementos que no entendía, que aparecen en libros anteriores, lo disfruté mucho.

En esta ocasión me reencontré con la ciudad de Ankh-Morpork. Está muy cambiada, pasó de ser la cuna de incontables ladrones, básicamente un nido de ratas, a ser una ciudad cosmopolita. Sus habitantes anteriormente en su mayoría eran humanos, de la peor calaña, pero humanos. Ahora además es habitada por enanos, trolls, trasgos, golems y todo cuanto puedas imaginar. Y todos han pasado a ser ciudadanos respetables con sus correspondientes empleos. 
La modernidad definitivamente ha llegado al disco y no sólo afectó a los humanos relegando a las otras razas al olvido, no. Pratchett nos muestra un mundo donde todas las razas comienzan a evolucionar con los avances tecnológicos, ninguna se queda atrás y cada cual tiene un potencial específico y encuentra su lugar en la nueva sociedad de Ankh-Morpork. Que a pesar de los cambios, sigue siendo gobernada por un tirano, claro, un tirano muy flexible y caprichoso, y que desde las primeras aventuras en el disco se ha mantenido en el trono indiscutiblemente. Me refiero a Lord Vetinari.

El majestuoso mundo mágico de Pratchett se comienza a civilizar. Ankh-Morpork ya tiene alcantarillado gracias al Rey de la M... Harry Rey, cuyo sobrenombre no es de su agrado. Harry se ha convertido en una especie de Magnate a costa de controlar los residuos intestinales de la población, cosa que lo hace muy feliz pero que no lo llena de orgullo. 

Otro adelanto tecnológico presente en la ciudad son los llamados "Clacs" una especie de telégrafo, cuya comunicación se basa en señales luminosas, que representan códigos. Son torres con equipamiento de iluminación que se extienden a lo largo del territorio y mantienen la comunicación entre ciudades y pueblos. El disco a comenzado a globalizarse. 

A todos estos pequeños adelantos se le suma el trabajo de un desconocido hombre que tras los fallidos intentos de su padre, logra dar con la formula para dominar el vapor. En un pueblo precisamente olvidado, Dick Simnel se adentra en el mundo de la matemática para dominar el peligroso vapor, y con la ayuda de la regla de cálculo logra dar forma a un nuevo invento que revolucionará el disco: La locomotora.

"Y eso lo dice un hombre que se rige por la regla de cálculo, el seno y el coseno, por no hablar ya de la tangente". 

Dick Simnel necesitará todo el dinero posible para poder llevar a la realidad su creación. Necesita un inversor. Recurre al famoso Harry Rey para plantearle que lo apoye financieramente. Lo que no sólo traería más dinero a Harry sino que también le otorgaría un nuevo apodo y podría sentirse orgulloso de entrar en un negocio que lo aleje de los excusados. 

-Señor sir Rey. he creado una máquina que puede transportar personas y mercancías más o menos a cualquier parte y que no necesita caballos porque funciona con agua y carbón. 

Pero en la ciudad de Ank-Morpork no pueden cerrarse tratos sin la autorización del patricio. Lord Vetinari da su bendición a la nueva empresa ferroviaria siempre y cuando se cumplan con sus caprichos personales. Para que las necesidades del patricio sean cubiertas de forma eficiente, entra en escena Húmedo Von Mustachen. Un antiguo sinverguenza que posee grandes habilidades parlamentarias para conseguir lo que desea, y que Lord Vetinari las aprovecha en beneficio de su ciudad. Y el señor Húmedo será el protagonista de esta historia en donde deberá afrontar grandes retos, como la construcción de la línea ferroviaria. 

Pero no todo será tan fácil. Un grupo de enanos rebeldes no está de acuerdo con el rumbo que están tomando los acontecimientos y se niegan a avanzar. No quieren modernizarse ni entablar relaciones con las otras razas, este grupo de enanos rebeldes conocidos como "grags" harán todo lo posible para evitar que el ferrocarril progrese e intentarán sabotearlo. Húmedo, El patricio, Harry, Dick y un sin fin de personajes deberán hacer frente a esta amenaza para dar comienzo a la era de la locomotora.

Este libro no es de lectura rápida, es un libro con una prosa envolvente, en el que te adentras en un mundo en donde la magia empieza a ser reemplazada por la tecnología. Los magos empiezan a quedar en el pasado y los nuevos reyes del mundo, los que sorprenden a la gente, son los ingenieros. 

"Húmedo jamás dudaba de las afirmaciones de Dick en lo tocante a la regla de cálculo; el chico sabía hacer bailar los números y Húmedo no lo había visto equivocarse ni una sola vez. Era como...como magia, pero sin los magos y todos sus desastres". 

El mundodisco está madurando, a pesar de que la narración va acompañada de un humor muy elegante que me sacó unas carcajadas tremendas. Las aventuras alocadas comienzan a desaparecer y ahora tienen un fin. Se emprenden hazañas para evitar guerras y derramamientos de sangre. Los personajes son realmente apasionados. Cada uno de ellos cree firmemente en sus convicciones, disfrutan lo que hacen, un claro ejemplo es el Ingeniero Dick Simnel, la mente maestra de la locomotora, al igual que el gran hombre de negocios Harry y el mismo Húmedo. Todos y otros muchos personajes dan lo mejor de si mismos para lograr un fin conjunto para beneficiar a los demás y al mismo tiempo disfrutar de la vida. 

Las razas han perdido sus rivalidades, nos encontramos en un mundo donde todos son libres de hacer lo que deseen y todos son ciudadanos respetables. Hay trolls abogados como también golems que se dedican al paisajismo. Pratchett rescata a una raza muy vapuleada en todas las historias de fantasía y con una genialidad tremenda les da un protagonismo espléndido en la historia, me refiero a los trasgos. Pasan de ser la peor calaña a ser un real aporte al mundo civilizado, no solo acabaron con la epidemia de ratas en Ankh-Morpork (ya que es su comida predilecta) sino que son muy inteligentes, aprenden con facilidad. Son una pieza clave en el desarrollo de las comunicaciones y a la vez son valientes luchadores, pero sin perder su carisma, con esa sonrisa diabólica y su mirada de picardía. Pratchett los caracteriza con un lenguaje y una forma de expresarse bastante singular, que a veces me dejo con lagrimas en los ojos de pura risa. Son realmente el plato fuerte de este libro.

Y como siempre Pratchett desliza su crítica social, poniendo en su mundo de fantasía los mismos problemas de nuestra vapuleada sociedad. Jugando con estos seres de fantasía nos muestra lo que no queremos ver, y lo que no queremos creer de nuestro propio mundo.

"...los bandidos y los gobernantes tienen tanto en común que podrían ser intercambiables en cualquier lugar del mundo..."


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